lunes, 22 de junio de 2015

Día del trabajador,el origen de su festejo.

El 1º de mayo ha sido consagrado como "Fiesta del Trabajo" y por extensión , como "Día de los Trabajadores" en muchos países del mundo en homenaje a todos los hombres y mujeres que cumplen con una esencial función  en las distintas actividades, logrando con su labor cotidiana, sentirse dignos ante la familia y la sociedad en la que se insertan.
Esta fecha fue instituida para conmemorar a los mártires de Chicago, Estados Unidos, donde murieron varias decenas de obreros que luchaban por la defensa de la jornada de las ocho horas, que finalmente se ha impuesto en el mundo.
Por eso es una jornada que aúna la celebración festiva y la reivindicación obrera.
Esta fecha tampoco pasa por alto en la escuela en donde se rinde  homenaje a todos los trabajadores mediante actividades especiales.










Cuento sobre profesiones y oficios:

Raimundo, el bombero más valiente del mundo
Lo llamaban así simplemente porque "mundo" rima con "Raimundo", pero no porque fuese tan valiente. Más bien era tímido y pequeñito y de ninguna manera parecía uno de esos héroes, intrépidos, valientes y audaces.
Sin embargo, Raimundo sabía cumplir muy bien con su deber y era el primero en vestirse y subir al camión de bomberos cuando sonaba la alarma.
Todos creen que los bomberos sólo apagan los incendios, pero no es así: también los llaman para resolver otro tipo de problemas.
Por ejemplo, los llamaron cuando el pero del Sr. González corrió al gato de doña Etelvina y el animal se asustó tanto que se trepó al árbol más alto del vecindario. Después no se pudo bajar y se pasó toda la noche maullando allá arriba. Y fue Raimundo quien lo rescató.
Cuando el hijo de doña Ágata metió la cabeza entre los barrotes del balcón y se quedó allí atorado, también llamaron a los bomberos y hubo que desarmar medio balcón para sacar al travieso.
Y aquella vez que se rompió un caño en la casa de doña Eduviges y se inundó el sótano, ¿a quienes llamaron? Sí, a los bomberos y fueron ellos quienes lo desagotaron.
Lo mismo sucedió cuando el Sr. Galimbertti quedó atrapado en el ascensor, entre el noveno y el décimo piso... por supuesto fueron los bomberos los que solucionaron el problema y lo rescataron, ¡siempre los bomberos!
Raimundo, era un bombero cumplidor y servicial, siempre dispuesto a socorrer a quien lo necesitara y no le gustaba que se rieran de él llamándolo "Raimundo, el bombero más valiente del mundo". Era una burla porque después de todo no es necesario ser un gigantón lleno de músculos para ser valiente. Y Raimundo esperaba poder demostrarlo algún día.
Y ese día llegó sin que nadie lo esperase.
En el cuartel de bomberos recibieron una llamada urgente: ¡el circo se estaba incendiando!
Era una situación realmente grave, las llamas eran enormes y todos trabajaban para apagarlas y, para salvar a los animales, alguien les había abierto las jaulas. Las fieras sueltas se habían escapado y andaban por toda la ciudad.
Alguien tenía que atraparlas, pero todos tenían miedo de hacerlo. Finalmente, el capitán ordenó a Raimundo que se ocupara del asunto.
El momento de demostrar que era valiente de verdad, ¡había llegado! ¡Por fin una situación bien difícil que necesitaba audacia y valentía!
Raimundo recordó haber oído que "la música amansa a las fieras" y corrió a su casa en busca de su violín. Su única preocupación era que entre tantas fieras hubiese alguna sorda, pero por suerte todas tenían buen oído.
Raimundo recorrió las calles tocando el violín y las fieras comenzaron a seguirlo para escuchar su música.
Así llegó hasta el circo, cuando ya estaba apagado el incendio y pudieron hacer entrar a cada animal en su jaula.
Al día siguiente la foto de "Raimundo, el bombero más valiente del mundo" estaba en la televisión, los diarios y, ¡hasta en Internet!

Preguntas de motivación sobre el cuento:

- ¿Dónde trabajaba Raimundo?
- ¿Cuándo lo llamaban?
- ¿Cuenta algún problema que haya resuelto Raimundo?
- ¿Cómo demostró ser el más valiente?